Trasplante de riñón
Una de las razones principales por la que los pacientes buscan recibir una donación de riñón es que las personas trasplantadas podrían disfrutar de una salud casi normal después de la cirugía; sin necesidad de diálisis.
Dato
Según datos del gobierno mexicano, durante el 1er trimestre del 2020 se registraron 17,383 pacientes en espera de un riñón.
Para entender mejor el tema comencemos por explicar ¿Qué es un trasplante de riñón?.
Consiste en una cirugía de mayores proporciones para conectar un riñón y un uréter a la vejiga y al sistema de suministro de sangre del organismo. (Durante este proceso no se retira ningún riñón al paciente que será trasplantado).
Debes tomar en cuenta que no cualquier persona es candidata para recibir un riñón donado, debes cumplir ciertos requisitos.
No podrás recibir un riñón, si...
- Tienes más de 70 años
- Tus pulmones no funcionan correctamente.
- Un órgano (que no sea un riñón) no reciba el flujo de sangre necesario.
- Tienes un sangrado en el tubo intestinal o úlcera péptica activa (una llaga en el revestimiento del estómago o el intestino superior).
- Tienes una enfermedad del corazón o en los vasos sanguíneos.
- Produces coagulación sanguínea anormal.
- Cuentas con defectos de nacimiento que involucren órganos que no sean los riñones.
- Padeces de Cáncer activo.
- Tienes daño cerebral grave y permanente.
- Mantienes una infección activa o VIH.
- Consumes constantemente sustancias toxicas o drogas (alcohol, tabaco, drogas alucinógenas o artificiales)
- Tabaquismo (dentro de los tres meses previos al trasplante).
- Padeces de obesidad: un índice de masa corporal (o IMC) superior a 35.
- Tienes antecedentes de no haber seguido las instrucciones del médico en lo que respecta a su plan de atención, medicamentos o asistencia a las consultas.
- Tienes problemas graves de salud mental sin controlar o tratar.
Los beneficios al recibir un riñón son:
- Capacidad para volver a gozar de una salud casi normal después de la cirugía; sin necesidad de diálisis.
- Mayores posibilidades de vivir más tiempo que con tratamiento de diálisis.
- Mejor adaptación al cuerpo (si el donante es una persona viva).
Puntos a considerar:
- A menudo se debe esperar mucho tiempo para que un donante reúna los requisitos y hay que dializarse durante la espera.
- Riesgos asociados con las cirugías mayores.
- Costos y efectos secundarios de los medicamentos que combaten el rechazo al órgano y que se deben tomar durante el resto de la vida.
- Riesgo elevado de padecer cáncer de piel (65 veces más probabilidades que otras personas).
- Necesidad de extraerse sangre 3 veces por semana durante varias semanas.
- Riesgo de que el organismo rechace el riñón trasplantado y tener que dializarse; aun estés trasplantado.
Para que una persona piense en realizarse un trasplante, le recomendamos tomar en cuenta las siguientes condiciones del proceso:
1. Tomar en cuenta la opción de ser trasplantado.
Consulte a un nefrólogo para que lo canalice a un centro de trasplante. Comuníquese con el centro de trasplante y con su compañía de seguros para comenzar con el proceso.
2. Asegúrese de reunir los requisitos.
Al candidato y al donante vivo, (si fuera el caso) se les harán pruebas para evaluar todos los sistemas principales del cuerpo.
Los miembros del equipo comprobarán si usted cuenta con los recursos de apoyo psicológico, social y económico que se necesitan para que el trasplante sea un éxito.
3. Encontrar un donante.
Si usted cuenta con un donante vivo, ya sea un familiar, un amigo o un desconocido; podría donar un riñón solo si su sangre y tejidos coinciden con los suyos y la persona reúne los requisitos médicos. Este tipo de trasplante le ofrece a usted la ventaja de que se puede hacer con más rapidez y se pueden obtener mejores resultados; sin embargo, el donante debe enfrentar todos los riesgos que supone una cirugía mayor.
De no contar con un donante vivo, el centro de trasplante pondrá su nombre en la lista de espera nacional de trasplante de órganos. Puede tomar meses o años encontrar un donante cuyas características coincidan con las suyas.
4. Planificar el proceso de trasplante.
Si tiene que esperar hasta que haya un donante, pregunte a su médico cómo debe prepararse para la diálisis y averigüe periódicamente cuál es su estado en la lista de espera del trasplante.
En general preserve su salud lo mejor posible mientras espera, prepare su casa para la recuperación posterior a la cirugía y determine quiénes serán sus cuidadores, tome previsiones relativas a la pérdida de ingresos, al empleo, al seguro, a los gastos médicos y a la ayuda financiera.
5. Este listo o lista para el momento de la cirugía.
Podría recibir la llamada a cualquier hora del día o de la noche. Los riñones solo pueden conservarse fuera del cuerpo de 24 a 48 horas.
Todavía habrá que hacer una evaluación final para verificar la idoneidad del órgano en cuanto este llegue.
6. Planifique su recuperación
Después de la cirugía, tendrá que permanecer en el hospital de 4 a 8 días, mientras que el donante deberá permanecer de 4 a 5. Puede que tenga que estar cerca del centro de trasplante hasta 4 semanas después de la cirugía, y volver 5 o 6 semanas después para que le retiren el stent.
Esperamos que esta información te sea de utilidad, recuerda siempre consultar a tu médico para tener una mejor evaluación y orientación.
Fuente: Intermountain Healthcare